Inicio
Experiencias
Chile

Chile: la naturaleza se hace sentir en Torres del Paine

Como ver una película en ultra HD, la belleza y colores del Parque Nacional Torres del Paine destacan por donde se los mire. Invitados por el Hotel Río Serrano, recorrimos sus rincones y disfrutamos de su maravilloso entorno con la comodidad y servicios de un 5 estrellas.

Una obra maestra de la naturaleza hecha en 40 millones de años por los glaciares y el viento: el macizo Paine puede ser el lugar montañoso más bello del planeta. Bosque, pampa, riscos, nevados, glaciares, cavernas, ríos, lagunas y lagos, playas y cascadas, todo en un espacio que en algunos lugares abarcaremos con una sola mirada. Y ver, además, huemules atentos, cóndores relajados y zorros culpeos, grandes como perros que aúllan sin pausa.

Invitados por el Hotel Río Serrano, dormimos en sus cómodas habitaciones con vista al macizo Paine y una gran infraestructura de materiales nobles que ofrecen terrazas, chimeneas y múltiples comodidades de un 5 estrellas. Ya hablaremos más de nuestro magnífico refugio y sus novedades (leer nota de la pág. 46), por ahora nos referiremos a las bellezas del destino reconocido como una de las Siete Maravillas del Mundo Moderno.

LA MAJESTUOSIDAD DE UN DESTINO.

No es posible imaginar un espectáculo más sobrecogedor que el Parque Nacional Torres del Paine. Seguimos a los cóndores en su vuelo para revelarnos los Campos de Hielo Sur y el glaciar Grey. Los glaciares con su piel rugosa y los enormes témpanos color calipso flotando en el lago no se pueden describir sin el lenguaje de los sueños.

Hay que reconocer que no es un destino fácil ni cercano –está ubicado a 400 km. al norte de Punta Arenas y a más de 2.500 km. al sur de Santiago–, pero cada momento vale la pena, siendo un momento único donde podemos encontrarnos en directo con la naturaleza inhóspita, y también con nosotros mismos.


Hay que reconocer que no es un destino fácil ni cercano –está ubicado a 400 km. al norte de Punta Arenas y a más de 2.500 km. al sur de Santiago–, pero cada momento vale la pena, siendo un momento único donde podemos encontrarnos en directo con la naturaleza inhóspita, y también con nosotros mismos.

En sí, el parque tiene una extensión de 181.414 ha. con un increíble despliegue de vida natural en cuanto flora, fauna y vegetación propia de la zona. Posee caminos para vehículos y senderos para caminatas, además de tres porterías (una de ellas a menos de 5 minutos del Hotel Río Serrano), una sede administrativa y siete guarderías ubicadas en diversos sectores.

La imagen más representativa son las tres cimas que corresponden a las Torres del Paine, las cuales se generaron producto del efecto del hielo glacial. La Torre Sur Di Agostini, de aproximadamente 2.850 msnm., es la más alta del macizo. Por su parte, la Torre Central alcanza los 2.460 msnm., mientras que la Torre Norte Monzino llega a los 2.260 msnm. Si se dejan, porque hay que decirlo que a veces pueden ser un poco veleidosas, sobrecogen a cualquiera. Desde el hotel se aprecian desde todas sus áreas comunes y habitaciones, pero nada mejor que hacerlo desde uno de sus sofás al costado de la chimenea (en alguna de sus salas de estar) junto a un chocolate caliente o un murta sour, dependiendo de la hora y quizás del huso horario... siempre en algún lugar será la hora del aperitivo.

LAS TORRES EN PROFUNDIDAD.

Opciones para apreciar su belleza varían según las habilidades del visitante. Si bien la gran mayoría de los visitantes llegan para realizar el Circuito Paine, un sendero que da la vuelta al macizo Paine, primero a media montaña y luego subiendo hasta los 1.350 msnm., pasando por ríos, lagos y glaciales como el Grey, Dickson y Perros, en una caminata que dura 7 a 10 días.

IMG_6920.jpg
<p><i></i></p><b> La belleza y colores del Parque Nacional Torres del Paine destacan por donde se los mire.</b><p></p><div><b><br></b></div>

La belleza y colores del Parque Nacional Torres del Paine destacan por donde se los mire.

Nosotros, los menos aventureros, podemos realizar excursiones de mediodía o full day. En este sentido, el Centro de Excursiones del hotel ofrece más de 12 opciones a través de diversos circuitos de trekking, paseos escénicos en vehículos, cabalgatas, montañismo y navegación, entre otros. Cabe destacar que estos recorridos son supervisados por guías especializados que no sólo están atentos a las necesidades individuales, sino que son verdaderos botánicos y profesores de la historia, morfología y climatología de la zona.

Por ejemplo, el Full Day Paine en Vehículo es una excelente alternativa para conocer gran parte del parque. Lagos, ríos y cascadas de hermosos colores, la majestuosidad del macizo, además de la flora y fauna de la Patagonia son postales que nos acompañaron durante todo nuestro viaje para finalizar en la laguna Azul, lugar donde almorzamos con una vista privilegiada a las famosas Torres del Paine. Claro, eso no está asegurado, ya que el clima a veces puede jugar malas pasadas y cubrir por completo el macizo.

condor12.jpg
<p><i></i></p><p><b> En el lugar se pueden ver huemules atentos, cóndores relajados y zorros culpeos.</b></p><p><b><br></b></p><p></p><p></p>

En el lugar se pueden ver huemules atentos, cóndores relajados y zorros culpeos.

El tour Mirador Cuernos permite a través de un trekking de nivel medio disfrutar del área central del parque. Es ideal para apreciar el Paine Grande, montaña que domina el macizo con sus 3.050 msnm., los siempre peculiares cuernos, el valle y el glaciar del Francés y dos de los lagos de mayor belleza y tamaño, Nordenskjold y Pehoe, que son separados por una de las cascadas imperdibles del parque, el salto Grande.

Si somos más osados, el trekking a la famosa Base Las Torres, es una de las excursiones más icónicas de todo el parque. Este viaje nos permite internarnos a través del valle del Ascencio, en honor al renombrado bandido de la Patagonia de principios del siglo pasado, para conocer los bosques centenarios de lengas que nos conducirán a la base de la morrena frontal dejada por el antiguo avance del glaciar Torres, para luego ascender para alcanzar las imponentes Torres del Paine y su laguna a los pies de éstas.

La Patagonia es tierra de gauchos y caballos, por lo que no puedo dejar de nombrar la cabalgata al río Nutria que nos lleva por la belleza escénica del río Serrano hasta su confluencia con el Grey, cuyos diferentes colores, ambos de origen glaciar y la magnitud del macizo Paine no dejan de sorprender. Luego cruzamos a caballo el río Nutria, internándonos en los bosques de nothofagus, que en nuestro país están compuestos por más de 10 especies arbóreas características de la Patagonia.

Torres del Paine está abierto todo del año y es administrado por la Corporación Nacional Forestal. Sus porterías de acceso se encuentran a 115 km. de Puerto Natales. El horario de atención en las porterías Sarmiento y Laguna Amarga es de 8.30 a 20.30. El parque cuenta con un centro de operaciones llamado Sede Administrativa. Está ubicado en el sector lago Toro, a 145 km. de Puerto Natales y a 33 km. de la portería Sarmiento. Cabe mencionar que los programas all inclusive del Hotel Río Serrano incluyen excursiones y entradas al parque.

Deja tu comentario