A 130 km. de Buenos Aires se encuentra Navarro, un increíble destino de tradición y fe, perfecto para escapadas. Su propuesta turística y religiosa se encuentra íntimamente enlazada con la primera santa argentina Mama Antula, que acaba de canonizar el Papá Francisco.
María Antonia de San José, es su nombre completo y es reconocida hasta nuestros días por ser pionera de los derechos humanos en Argentina. En 1745 vistió el hábito de ‘beata’ jesuita y comenzó a vivir en comunidad: su meta era llevar a Dios a donde no lo conocían y cuidar de los niños y enfermos.
Caminó más de 4 mil kilómetros descalza para visitar las regiones pobres del nordeste y ofreció ejercicios espirituales a 70 mil personas en 8 años. La trataron de loca, pero también como una de las madres de la patria porque en sus ceremonias religiosas participaron Manuel Belgrano y Miguel de Azcuénaga.
En Navarro se pueden recorrer “Los caminos de la fe Mama Antula”, que se encuentran en el camping municipal, para que de manera autoguiada los visitantes conozcas su paso por esta localidad.
Este circuito de fe se ubica en el terraplén de la Laguna de Navarro, cuenta con 12 estaciones, que muestran la vida y obra de María Antonia de San José. Este espacio público se puede visitar todos los días. Su principal día de devoción es el 7 de marzo, fecha en la que falleció Antula en 1799.
Descubrir la belleza de este destino turístico bonaerense, sumergido en la espiritualidad, es una experiencia intransferible. Las visitas ofrecen una inmersión en la fe. Con el cálido recibimiento de su amable población, los turistas construyen lazos desde la espiritualidad y la hospitalidad. Navarro brinda vivencias y tranquilidad, atardeceres llenos de colores, manjares caseros y rincones plenos de tradición, que invitan a volver.
Escapadas en Buenos Aires: tras los pasos de la primera santa argentina Mama Antula
La ciudad de Navarro entrelaza la fe con paisajes rurales y el Pueblo Turístico Las Marianas, que atrae a quienes aman las fotografías con escenarios de antaño.
La ciudad cuenta con tres pueblos rurales, llamados Las Marianas, Villa Moll y J.J Almeyra, estos pueblos se caracterizan por su estilo cultural que sigue intacto a lo largo del tiempo y nos recuerdan su historia, con lugares turísticos por el cual vale la pena conocer y recorrer.
En cuanto a la propuesta de turismo religioso, además de “Los caminos de la fe Mama Antula”, vale la pena visitar su principal templo “Parroquia San Lorenzo Martir”.
Se caracteriza por su importante historia, pero también por su hermosa estructura. Se comenzó a construir en el año 1864, sobre los cimientos que en el mismo espacio ocuparon el primer oratorio y las tres capillas precedentes que sirvieron a los fieles desde 1798. De estilo jónico romano, planta cuadrilonga, tres naves y dos torres, fue inaugurado al servicio litúrgico en septiembre de 1870.
Su interior, muestra importantes piezas de arte sacro, entre las que se destaca el Cristo del altar mayor, tallado en madera por las misiones jesuitas, con más de 400 años de antigüedad.
Las inigualables y sonoras campanas de su campanario fueron fundidas en Francia a durante la primera década del siglo XX. En el atrio se muestra la campana del primer Oratorio, fundida en Ámsterdam, Holanda, en el año 1786 y que fuera la que llamó a duelo al momento del fusilamiento del Gobernador de Buenos Aires, Coronel Manuel Dorrego.
Junto al bicentenario campana, también se exhibe la cruz que coronaba la última capilla demolida en el lugar y que señaló la Casa de Dios desde 1838 hasta 1864, año en que se demolió para dar lugar a la construcción del actual templo.
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