-Aprender otro idioma. Actualmente existen programas para hacer cursos en el exterior en instituciones educativas, con profesores, o mediante planes de intercambio para aprender la lengua del país al que se visita. Así, los compañeros de estudio se convierten en compañeros de viaje. Obviamente es necesario permanecer al menos dos semanas en el destino para hacerse de las herramientas básicas del idioma foráneo. Y además el viajero podrá participar diariamente en las conversaciones con el resto de la gente.
¿Viajás sola/o?: consejos para hacerte amigos en los viajes
Las nuevas generaciones tienen sed de viajes y de ganar experiencias en destinos alrededor del mundo. Muchos de ellos salen sin compañeros de ruta pero van haciéndose amigos. Aquí algunos tips de lugares y formas para facilitar el contacto con otros alrededor del orbe.
-Asistir a cursos en el destino. Muchos destinos ofrecen la posibilidad de participar charlas vivenciales para entrar en contacto con aspectos intrínsecos de la cultura del lugar. Desde clases de cocina, arte tradicional, baile y hasta seminarios de historia local, las alternativas son múltiples, abriendo la puerta a conocer gente.
-Vivir con locales. Es una experiencia única y sumamente rica pasar la estadía en una vivienda de un habitante del destino. No sólo por la posibilidad de conocer de primera mano la vida diaria de los locales, sino también porque permite practicar el idioma, zambullirse en la cultura y, además, conocer gente, vecinos y lugareños.
-Voluntariado. Servir a la comunidad o al medio ambiente en forma voluntaria es una posibilidad que también se puede concretar durante un viaje. Además, mediante estas acciones el viajero podrá sumergirse en la cultura y ponerse en contacto con gente que se preocupa por causas importantes, sin olvidar que es una forma de hacer algo que te apasione en compañía de personas que comparten los mismos intereses.
-Comer en mesas comunitarias. Muchos restaurantes cuentan con mesas comunitarias (de hecho, McDonald´s las tiene) para compartir la comida junto a otras personas, siendo más fácil entablar una conversación en esos ámbitos.
-Tours grupales. Un clásico es contratar un circuito para conocer en profundidad la ciudad (hay propuestas que son gratuitas) o los alrededores. Es una buena alternativa para intercambiar palabras con los compañeros de esta propuesta.
-Alojamiento. Los hostels suelen ser ideales para conocer gente, no sólo por los espacios comunes que ofrecen los establecimientos que propician el diálogo, como el lobby o el restaurante, sino también en las habitaciones que muchas veces pueden ser compartidas. Alojarse con personas con los mismos intereses es la mejor manera de iniciar relaciones.
-Contactos. A los amigos, o amigos de amigos, conocidos o personas que hayan viajado recientemente al lugar que uno está por conocer, hay que contactarlos previamente para pedirles algún consejo o incluso para que pasen algún contacto en el destino. Puede ocurrir que las personas afuera los reciban, los lleven a pasear y les presenten amigos.
-Un habitante más. Permanecer en una ciudad durante un tiempo prolongado hace que el visitante ya cuente con su restaurante, bar o café preferido. Como habitué uno ya conoce al personal y a otras personas como uno que son clientes frecuentes.
-Grupo social. Al aterrizar en un lugar es fundamental estar predispuestos a los planes, las fiestas y actividades sociales de manera de poder hacer amigos muy rápido.
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