Tomar justo lo necesario, apretarlo todo en la maleta y cerrar los ojos hasta aterrizar. Este es el ideal de viaje perfecto para aquellos que han preparado vuelos por Europa para las vacaciones. Sin embargo, en el aeropuerto siempre hay peligro de sufrir algún pequeño inconveniente, más teniendo en cuenta el equipaje.
Hasta hace poco, la maleta de mano siempre había sido un bulto gratuito, pero algunas compañías aéreas llevan años lucrándose con el precio de este tipo de equipaje. Así, a pesar de que las organizaciones de usuarios lleven años denunciando esta práctica, no ha sido hasta mayo de 2024 cuando el Ministerio de Consumo de España ha tomado cartas a este respecto.
En 2023, el eurodiputado Jordi Cañas, de Ciudadanos, fue el responsable de emitir una petición expresa a la Comisión Europea y a los Estados miembros para desarrollar una sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), que considera el equipaje de mano como un “elemento indispensable” del pasajero y, por tanto, no puede estar sujeto a un coste extra.
No obstante, a pesar de ello, el cobro por el equipaje de mano continuó siendo habitual en muchas aerolíneas. Ahora queda ver si tras la multa del Consumo esta situación cambia. Por el momento, es importante dejar claro lo que debe hacer el consumidor ante este tipo de situaciones.
Cómo reclamar el dinero del equipaje de mano en Europa
La Ley de Navegación Aérea, en su artículo 97, establece que el transporte del equipaje está incluido de forma gratuita en el precio del billete. Sin embargo, esta maleta está sujeta a límites de peso y volumen determinados por cada compañía aérea, y algunas imponen restricciones claramente insuficientes para el equipaje de mano.
Entre tanto, el límite suele estar en los diez kilos, aunque algunas compañías lo reducen a siete.
Los pasos a seguir si te cobran por el equipaje de mano son los siguientes:
- Se recomienda reclamar directamente a la compañía aérea por correo electrónico o a través de su página web, adjuntando toda la documentación relacionada con el vuelo, como la tarjeta de embarque, los billetes y la reserva.
- De no obtener el resultado esperado, el siguiente paso es reclamar ante la Dirección General de Consumo de tu Comunidad Autónoma o el Centro Europeo del Consumidor en España.
- Por último, si la tercera opción tampoco es efectiva, el siguiente paso es interponer una demanda ante los tribunales. Dado que se trata de una reclamación de menos de 2.000 euros, no es necesario contratar abogado ni procurador, lo que la hace totalmente gratuita.
Es importante destacar que los usuarios pueden consultar la web de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) para conocer el reglamento vigente y sus derechos en caso de retrasos, cancelaciones de vuelos, cambios de clase y denegación del embarque.