El futuro de Machu Picchu, una de las maravillas del mundo moderno y Patrimonio de la Humanidad, está en el centro de la atención global. En septiembre de 2025, la organización New7Wonders advirtió que la ciudadela inca podría perder su título, encendiendo las alarmas sobre la manera en que se gestiona el atractivo turístico más emblemático del Perú.
Machu Picchu en riesgo: qué ocurre con esta joya de Perú y por qué podría dejar de ser una maravilla mundial
Machu Picchu enfrenta una importante crisis, conflictos sociales y sobrecarga turística ponen en alerta a Perú. Podría perder su título como maravilla mundial.
Machu Picchu, la maravilla de Perú atraviesa un momento de incertidumbre que preocupa al turismo del país.
La alerta llega en un contexto de masificación de visitantes, conflictos sociales que paralizaron el acceso al santuario y proyectos estatales que avanzan a paso lento. Para el turismo internacional, que representa la mayor parte de las visitas, esta podría ser una situación riesgosa por la pérdida de credibilidad y la amenaza a la experiencia del viajero.
¿Por qué Machu Picchu podría perder su título como Maravilla del Mundo?
La advertencia proviene de New7Wonders, la fundación suiza que en 2007 organizó la votación mundial para elegir a las siete maravillas del mundo moderno, en la que también se distinguió a Machu Picchu.
El organismo alertó sobre la falta de planificación para manejar la creciente afluencia de visitantes, las denuncias por irregularidades en la venta de boletos, alzas en los precios y los conflictos sociales que afectan la accesibilidad al santuario.
El caso es inédito, ya que es la primera vez que una de las maravillas modernas recibe una advertencia formal por mala gestión. Por lo tanto, se pone en juego no solo el título, sino también la credibilidad del turismo en Perú ante el mundo.
¿Cómo ha cambiado el turismo en Machu Picchu en los últimos años?
Desde 2007, cuando fue reconocida como maravilla del mundo moderno, la afluencia de turistas creció más de 112%. Mientras que en ese año ingresaron 403.995 visitantes en el período enero-julio, en 2025 ya fueron 858.841 en los mismos meses. El récord histórico lo marcó 2019, con casi 889.000 visitas.
El turismo internacional es el motor principal: en algunos años representó hasta el 80% del total de ingresos. Tras la fuerte caída durante la pandemia, las cifras se recuperaron en 2024, superando incluso los niveles prepandémicos, lo que refuerza la relevancia de Machu Picchu como símbolo turístico global.
Además de ser una de las maravillas del mundo moderno, Machu Picchu es Patrimonio de la Humanidad desde 1983. Este estatus de la Unesco prioriza la conservación cultural y natural del sitio, mientras que la distinción de New7Wonders ha impulsado la masificación del turismo y una mayor visibilidad internacional.
¿Cómo impactan los conflictos sociales en la experiencia de los viajeros?
En los últimos días de septiembre, un paro indefinido en Cusco bloqueó trenes y buses hacia Machu Picchu, dejando a miles de visitantes varados.
La disputa por la concesión del transporte entre Aguas Calientes y la ciudadela arqueológica derivó en protestas, bloqueos y pérdidas millonarias para la economía local.
Aunque una tregua permitió la reactivación temporal del acceso, la inestabilidad evidenció cómo la falta de coordinación en la gestión turística afecta directamente la imagen internacional de Perú.
El Ministerio de Cultura anunció ocho proyectos de inversión para mejorar la infraestructura en el área de Machu Picchu. El presupuesto inicial, superior a los 12 millones de soles, se redujo con el tiempo y a nueve meses de iniciado apenas se había ejecutado un 15%.
El proyecto más ambicioso, la ampliación de un centro de visitantes, refleja esta lentitud: con más de 5,5 millones de soles asignados, solo se había utilizado el 1,6%. La brecha entre lo planificado y lo ejecutado genera dudas sobre la capacidad del Estado para enfrentar los desafíos.
¿Qué está en juego para el turismo en Perú?
La ciudadela inca no es solo el ícono turístico de Perú, también se trata de un destino emblemático muy visitado desde distintas partes del mundo.
La posibilidad de perder su título como maravilla moderna amenaza con dañar la reputación del país, reducir su competitividad y afectar la experiencia de millones de viajeros que sueñan con conocerla.
La advertencia de New7Wonders marca un punto de inflexión, pero, ¿logrará marcar la diferencia?
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