En el corazón de la provincia de Mendoza, Malargüe se presenta como un destino imperdible para aquellos que buscan un verano 2024 lleno de experiencias únicas sin costo. Este rincón mendocino ofrece una combinación perfecta de paisajes naturales, aventuras al aire libre y una rica cultura que cautiva a visitantes de todas partes.
Bajo el cálido sol mendocino, Malargüe se convierte en el escenario ideal para disfrutar de actividades gratuitas que van más allá de lo convencional. Esta temporada veraniega promete ser inolvidable para quienes se aventuren a descubrir sus encantos.
Ya sea explorando la majestuosidad de sus entornos naturales o sumergiéndose en espacios históricos y culturales de interés, esta encantadora localidad mendocina rodeada por la imponente Cordillera de los Andes tiene mucho para conocer.
Es considerada la puerta norte de la Patagonia Argentina, ya que tiene muchas similitudes en flora, fauna, clima, y geografía con la región del sur de Argentina. En Verano, las temperaturas rondan entre los 13 y 27 grados.
Tomando como punto de partida la preciosa ciudad, donde muchos escogen hacer base para ir a visitar otros lugares de las tierras mendocinas, te llevaremos a pasear por algunos de los atractivos que agradecerá tu billetera.
A continuación, te compartimos 3 actividades gratis que podés hacer en el destino si vas en esta época estival.
1. Los encantadores espejos de agua de Mendoza en Pozo de las Animas
Un enclave exótico y de acceso gratuito, aguarda a solo 57 km. de la ciudad de Malargüe, cerca deLas Leñas: Pozo de las Animas.
Este singular paraje, ubicado en el valle de Los Molles, destaca por su formación única, compuesta por dos dolinas erosionadas por ríos subterráneos que han originado dos espejos de agua de aproximadamente 300 metros de diámetro cada uno.
Conocido también como Trolope-Co o "agua del gritadero" en lengua mapuche, el Pozo de las Ánimas se ve inmerso en diversas leyendas transmitidas de generación en generación entre los pobladores rurales.
Además de que el acceso no tiene costo, el predio cuenta con carteles informativos que explican los procesos geológicos que lo han moldeado a lo largo del tiempo.
Con alturas que rondan los 2.000 metros sobre el nivel del mar, estos espejos de agua se consideran depresiones, alcanzando una profundidad de hasta 80 metros. Gracias a su proximidad a la Ruta Provincial 222, se convierten en un atractivo turístico de fácil acceso, abierto para visitas durante todo el año.
2. Astroturismo de verano en el Observatorio Pierre Auger
Malargüe alberga el Observatorio de Rayos Cósmicos Pierre Auger, el observatorio de astrofísica más grande del mundo dedicado al estudio de rayos cósmicos de alta energía. Se ubica sobre en Av. San Martín Norte 304 (Ruta 40 Norte).
Este observatorio internacional tiene como objetivo determinar el origen e identidad de los rayos cósmicos, contribuyendo así al avance en la comprensión del universo.
Estos rayos cósmicos, partículas subatómicas provenientes del espacio exterior, ofrecen una ventana única para comprender fenómenos altamente energéticos que suceden en el cosmos.
La sala destinada a los visitantes ofrece, de manera gratuita, una muestra interactiva permanente. Los visitantes reciben una guía orientativa que facilita la exploración de la sala, equipada con material científico que incluye detectores en tiempo real, maquetas, videos y posters detallados para comprender el propósito y el trabajo del observatorio.
Las visitas generales están disponibles todos los días, con tres horarios por la mañana y tres por la tarde, con una duración aproximada del recorrido de 30 minutos. Durante la experiencia, los visitantes tienen la oportunidad de sumergirse en el fascinante mundo de la astrofísica y la investigación de vanguardia sobre los misteriosos rayos.
3. Historia y cultura en el Museo Regional Malargüe
Alojado en la histórica casa de la estancia La Orteguina, reconocida como monumento patrimonial histórico provincia, se encuentra el Museo Regional de Malargüe.
Este fascinante viaje en el tiempo comienza hace millones de años, exhibiendo fósiles que abarcan diferentes periodos geológicos, desde las intrusiones marinas hasta la formación de la cordillera, pasando por el hábitat de los dinosaurios y los imponentes mamíferos del cuaternario.
El museo se encuentra ubicado sobre la Ruta 40 km. 327 y comenzó a funcionar en 1971 con el propósito de preservar el patrimonio local y las raíces de la comunidad.
Gracias al aporte constante de la comunidad, el museo ha ampliado su colección y actualmente alberga cuatro salas temáticas diseñadas para brindar una comprensión más completa a los visitantes.
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