Chubut es uno de los destinos ideales para las vacaciones de verano 2024. Esta región de la Patagonia cuenta con muchísimas atracciones turísticas y parques nacionales que se pueden recorrer de punta a punta en pocos días. Su parte cordillerana, por ejemplo, es ideal para un road trip.
Dentro de esta región, Esquel es la ciudad más grande y con mayor capacidad hotelera para recibir al turismo. Además, cuenta con varios atractivos para disfrutar, lo que hace que sea imposible estar de paso. Aconsejamos quedarse unos tres días en Esquel como mínimo, y aquí te diremos lo que tenés que conocer sí o sí durante tu estadía en Esquel.
Día 1: Conocer el Parque Nacional Los Alerces, una joya del verano
El Parque Nacional Los Alerces es el principal atractivo de los alrededores de Esquel. Con tres puertas de acceso, la reserva natural alberga glaciares como el Torrecillas, bosques de alerces, ríos que conectan lagos y, por supuesto, enormes espejos de agua dulce y cristalina rodeados de montañas de la cordillera de los Andes. Hay pasarelas para cruzar los ríos, senderos por el bosque con árboles como el arrayán y el ciprés y pequeñas playas de piedra para relajarse.
Si bien el acceso desde Esquel al parque nacional está pavimentado, el camino que bordea los lagos dentro del parque es de ripio, aunque está bien mantenido. Hay zonas de aparcamiento y de paseo.
Dentro del Parque Nacional Los Alerces también se encuentra el complejo Hidroeléctrico Futaleufú, que se puede visitar en un paseo en coche por el enorme muro de hormigón. También hay visitas guiadas a la usina.
Día 2: Explorar los Túneles de Hielo de Esquel
El espectáculo de los túneles de hielo resulta asombroso y una especie de regalo de la naturaleza para contemplar por el tiempo que dure la magia. A 50 km de Esquel, ascendiendo por las laderas del cerro La Torta, una formación natural, un túnel de hielo, es un atractivo del parque nacional tan breve como un suspiro.
Las condiciones geográficas y climáticas permiten que en la zona alta del cerro se forme un manto blanco y refractario de nieves casi eternas, al reparo del sol. Llegado el verano, las capas de hielo comienzan a derretirse de abajo hacia arriba por el efecto de la temperatura de la tierra. Debajo de ese río de hielo, se forma un túnel natural de unos 100 m. de longitud que se puede visitar durante unas semanas del verano.
Se trata de un paseo que se puede hacer únicamente con agencia. Luego de una travesía en 4x4 que asciende un tramo del cerro, disfrutando de las fusiones del paisaje de estepa, cordillera y bosques del parque nacional. La experiencia se complementa con un maravilloso trekking, donde estaremos inmersos en una sensación de bienestar y conexión con la naturaleza, dibujándose cada tanto la silueta del lago Futalaufquen a lo lejos.
Día 3: Excursión al valle de Piedra Parada
Piedra Parada es uno de los destinos emergentes de Chubut y año tras año recibe más visitantes. Se encuentra a unos 135 km. de Esquel y es conocida por ser una zona de transición entre la estepa patagónica y el comienzo de los valles cordilleranos. En unos pocos kilómetros se pasa de la nada a la cordillera de los Andes o viceversa. Su nombre se debe, justamente, por una piedra parada que adorna el paisaje. En realidad es una mole de roca volcánica de 100 m. de base y casi 250 m. de altura que se alza solitaria sobre una orilla del río Chubut.
¿Se puede escalar la Piedra Parada? Por supuesto, pero es una actividad un tanto riesgosa y es recomendable que lo hagan escaladores con experiencia. Quienes deseen pueden realizar el trekking que ofrece este lugar. Se puede hacer una caminata de casi 10 km. siguiendo un sendero angosto que corre entre los murallones del cañadón de la Buitrera.
El camino que se sigue es un antiguo sendero utilizado desde hace siglos por todos los que se aventuraron a pasar por estos lugares. Un delgado hilo de agua corre junto al sendero entrecruzándose con él en varios tramos y obligándonos, a veces, a atravesarlo pisando sobre piedras o tablas.
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