El brunch ganó las mañanas de los fines de semana en Buenos Aires, hace ya algunos años. Su nombre es una conjunción de breakfast y lunch, porque representaba combinación de los mejor de estos dos mundos dulces y salados. Si bien las versiones de la tarde deberían denominarse Drunch, muchos eligen seguir llamando brunch a esta propuesta tan exquisita.
Ni merienda ni cena: los brunchs de tarde son tendencia en Buenos Aires y combinan arte, moda y gastronomía
El brunch se impuso en Buenos Aires hace algunos años, pero en los últimos meses esta propuesta se instaló en las tardes. Además, suma arte y moda.
Este verano 2025, los brunchs de tarde son la tendencia en Buenos Aires.
Asimismo, para darle valor a la propuesta gastronómica, en Buenos Aires se convirtió en tendencia los brunch a los que se les suma una propuesta de arte, moda y pintura. El objetivo es que esta experiencia de sabores sea una salida en sí misma, con familia, amigos o en pareja.
Museos de arte con la mejor gastronomía
Tal es así que en Palermo, Little Claire (Gorriti 4918) ofrece deliciosas propuestas dulces y saladas para la tarde y también cuenta con un espacio y materiales para pintar vajilla. Además, hay profesores que brindan tips para que cada visitante logre su mejor obra de arte, café de por medio.
En tanto, las cafeterías Croque Madame combinan su gastronomía francesa con espacios de arte. De modo, que la visita a un museo se puede coronar con el mejor café y un buen croque madame, unas french toast o un avocado toast.
Tal es el cado del Croque Madame emplazado en el Museo Nacional de Arte Decorativo (Av. del Libertador 1902) y el Croque Madame en el Museo Colección Amalita (Malecón Pierina Dealessi 140), Puerto Madero.
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Brunch como en Francia, pero en Buenos Aires
Por su parte, el Novotel Buenos Aires lanzó una nueva carta de su brunch “La Vie en Rose” 2025. El Restaurante Patio #378 es el escenario perfecto y ofrece una experiencia gastronómica encantadora y versátil, perfecta tanto para citas románticas como para reuniones con amigos.
Se trata de un brunch al estilo parisino con el equilibrio perfecto entreopciones dulces y saladas. El ambiente es otro de los puntos fuertes, lo que añade un toque especial a la experiencia, un patio interno con piscina, a pasos del Obelisco.
La propuesta incluye: dos infusiones (té o café), dos jugos de naranjas y dos copas de espumoso Trivento Brut Nature, Lingote naranja y coco, Mousse de pomelo y palet de frutillas, Sableé de cacao, flan de dulce de leche, bananas caramelizadas y crema de mascarpone; Madeleines de limas, Profiterol con diplomata de café, ganache de chocolate con leche y café; Lunettes ganache de chocolate blanco, geleé de maracuyá & vainilla; y Cookie red velvet, mousse de queso, ganache de chocolate blanco & vainilla.
Entre los salados se destacan la Brusquetta con queso crema, queso Brie, frutillas, geleé de frutilla & menta; Roll de miga con ananá, queso crema & jamón crudo; Pan de cúrcuma, queso azul, rúcula & bondiola; Fosforito de jamón & queso; Chipa con lomito, compota de cebolla & mostaza y Quiche Lorraine.
Se podrá disfrutar de martes a domingos y feriados en el horario de 17 a 19. El valor es de $45 mil para dos personas.
Además, en el Mes de la Mujer, el hotel invita a vivir la experiencia “Black & White Runaway” el 26 de marzo, un evento de arte que combina moda con el brunch “La Vie en Rose”. El valor es de $28 mil por persona (entrada + merienda).
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